Vegetación pascícola y arbustiva

Vegetación pascícola y arbustiva

 

Al margen de la flora rupícola, ligada al medio rocoso, en las zonas en las que el desarrollo y espesor del suelo lo permite prospera otro tipo de vegetación que va desde el pastizal al matorral, dotando grandes zonas del Parque de una mayor cobertura. En este caso van a ser el clima, la orientación, con una mayor o menor insolación asociada, la naturaleza caliza del suelo y su profundidad, los factores determinantes a la hora de encontrar unas u otras especies.

Se pueden reconocer las siguientes comunidades:

  1. Los pastizales, formados por gramíneas vivaces duras, de porte elevado, que se desarrollan sobre suelos evolucionados. En laderas con fuertes pendientes y repisas de acantilados encontramos espartales dominados por el esparto (Stipa tenacissima). En estos mismos biotopos, pero sobre suelos margosos mucho más compactos y ocupando cubetas y taludes, encontramos albardinares, comunidades de mediana talla en los que domina el albardín (Lygeum spartum). Por último, alternando con romerales, encontramos lastonares de mediana talla y elevada cobertura dominados por el lastón (Brachypodium retusum).
  2. La garriga, matorrales de pequeña talla (romerales, tomillares....) caracterizados por la presencia de especies como el romero (Rosmarinus officinalis), el tomillo (Thymus vulgaris y T. aestivus), la lavanda dentada (Lavandula dentata), la coronilla de hoja fina (Coronilla juncea), la albaida (Anthyllis cytisoides), las estepas blanca (Cistus albidus) y negra (Cistus monspeliensis).
  3. La maquia, formación arbustiva de elevado porte, constituida por matorrales esclerófilos capaces de ocupar suelos poco profundos y con déficit hídrico. Las especies dominantes van a ser el lentisco (Pistacia lentiscus), el bayón (Osyris lanceolata), el palmito (Chamaerops humilis), el aladierno (Rhamnus alaternus) y la sabina negra (Juniperus phoenicea), con predominio de unas u otras en función de la  altura y acompañadas por el pino carrasco (Pinus halepensis) cuando la profundidad del suelo lo permite.