La restinga

La restinga

devesa

mallada

 ruta

 Sylvia melanocephala

merenderos

Oryctolagus cuniculus

AMBIENTES: LA RESTINGA

La restinga o barra arenosa, es el ambiente más complejo y, a su vez, el que se halla sometido a una mayor presión de degradación. Se refiere al cordón litoral que recorre el Parque Natural de norte a sur y cuyo origen se halla en las arenas distribuidas por la corriente de deriva  que han llegado al mar procedentes de los aportes del río Turia.

En la restinga aparece una zonación vegetal muy bien diferenciada, debido a unas condiciones de aridez causadas, entre otros factores, por la abrasión de los vientos marinos cargados de sal, y por la rápida filtración del agua de lluvia, que, junto con la pobreza y la movilidad del sustrato, hacen que sea un área muy difícil de colonizar. Se pueden diferenciar cuatro subambientes:

La playa: presenta unas características bastante uniformes a lo largo de todo el sistema. Se halla constituida por arenas con bancos y lentejones ocasionales de gravas o cantos. Se pueden encontrar desde restos de organismos marinos, como conchas de diversas especies de moluscos, huevos de tiburón..., hasta ciertas especies de aves, como el correlimos tridáctilo en invierno, o diversas especies de gaviotas, que se alimentan aquí.


El cordón de dunas delanteras: presenta, a pesar de la elevada presión humana a que se ve sometido, una morfología muy singular y de gran valor paisajístico. Este cordón dunar es el más próximo a la playa y apenas se encuentra fijado por la vegetación. Es el sector más afectado por la actividad turística.
En estas dunas se desarrolla una vegetación como el cuernecillo de mar, la algodonosa, u otras especies que, mediante sus largas raíces, adquieren una ventaja a la hora de alcanzar la capa freática. Este ambiente lo utilizan animales como el escarabajo pelotero, la lagartija colirroja, o el chorlitejo patinegro.
 
El cordón dunar interior: aparece tras el primer frente dunar; más antiguo que éste. Se encuentra totalmente colonizado por una densa vegetación de pinar, con el pino carrasco, y matorral, donde mayoritariamente abunda el aladierno y el lentisco. Esta última especie es importantísima para las aves frugívoras que, durante la migración otoñal y el invierno, encuentran en sus bayas un recurso alimenticio con un alto contenido en grasas. Entre otras, podemos encontrar el petirrojo y el mosquitero común como invernantes, o la curruca cabecinegra como residente. Destaca también el aguililla calzada durante el invierno.
Otros animales interesantes son los mamíferos, entre los que se puede citar el conejo y la gineta.
 
Las malladas: son pequeños saladares situados entre las dunas; en ellas se produce un encharcamiento estacional como consecuencia de las lluvias otoñales y la emergencia de agua subterránea procedente del mar. Dada la presencia de sal en el suelo, la vegetación es muy interesante. Se puede encontrar la cirialera y el "borró" (Spartina versicolor), utilizada para el tejado de las barracas.