Descripción - PN Serra Calderona

Ruta blanca: Senda de los Cartujos

Dificultad: Alta

Distancia: 37,5 kilómetros

Tiempo estimado: 10 horas y 30 minutos

Con esta senda se pretende la recuperación del itinerario utilizado por los criados y los monjes de las cartujas de Valldecrist (Altura) y Portacoeli (Serra) para mantener el contacto y transferirse las noticias,en aquellos tiempos en que no existían los medios de comunicación actuales.

Se dispone de escasos documentos para esclarecer los pasos exactos que se siguieron a través de la Serra Calderona. La Asociación Cultural Cartuja de Valldecrist ha hecho un cuidadoso estudio de los indicios que nos dan la toponimia, las propiedades monacales, los hitos y las cruces, la disponibilidad de fuentes, aljibes, corrales, refugios, masías,...que han sido la base para confeccionar el trazado.

La ruta que une ambas cartujas tiene una longitud de 37 kms, con una duración aproximada de 10 horas y 30 minutos. Se recomienda realizarla al menos en dos etapas, siendo el pueblo de Gátova el final e inicio de las etapas intermedias. Se puede realizar en ambos sentidos, está señalizada y dispone de varios paneles interpretativos.

El Parque Natural de la Sierra Calderona ofrece con esta ruta histórico-cultural el disfrute de amantes de la naturaleza y de la recreación histórica, pues es muy apropiada para la meditación y contemplación propia de los cartujos y de las montañas de la Sierra Calderona. Agradecer a la Asociación Cultural Cartuja de Valldecrist, y en especial a Jose Angel Planillo, la implicación y compromiso para la recuperación de este antiguo camino.

Desde Portacoeli (Serra), monasterio fundado en 1.272 por fray Andrés de Albalat, hasta Valldecrist (Altura), monasterio fundado en el 1.385 por Martín el Humano, este camino recorre de sur a norte la Serra Calderona, con una distancia total de 37,5 km, que se recomienda hacer en dos jornadas, con parada intermedia en Gátova. La duración total aproximada de toda la ruta es de 10 horas y 30 minutos. Se puede realizar en cualquiera de los sentidos, teniendo inicio o final en cada una de las cartujas.

Portacoeli es la cartuja más antigua de la Comunidad Valenciana, y una de las pocas cartujas españolas que hoy en día continúan acogiendo los monjes de la Orden de San Bruno. Desde la puerta, cruzando el acueducto, el camino asciende hasta la Pobleta, un antiguo poblado morisco de propiedad cartujana, donde se refugió durante la Guerra Civil, Manuel Azaña, presidente de la República. A partir de aquí, este camino nos permite adentrarnos en el corazón mismo del parque natural, pasando por lugares emblemáticos como fuentes, cruces, refugios, masías y algún poblado íbero como el de Torrejón en Gátova, que desde el siglo II a.C. ya vigilaba este paso de la sierra.

La Masía Tristán, propiedad de los monjes de Porta Coeli en sus inicios, es una zona donde descansar y ahcer uso de su área recreativa para coger fuerzas antes de proseguir el camino. En los kilómetros previos y posteriores a esta masía, se puede disfrutar de espectaculares miradores naturales de los valles del Palancia o del Carraixet,a sí como de unas vistas privilegiadas a l'Horta de València y del Mediterráneo dependiendo del sentido que lleve el caminante. Eso sí, tanto si va a Portacoeli como si va hacia Valldecrist, contemplará unas montañas que son una muestra representativa del paisaje cultural que nos han dejado nuestros antepasados, con los cultivos tradicionales de montaña dispuestos en bancales sustentados prodigiosamente con ribazos construidos en piedra seca.

Desde Valldecrist, monasterio fundado en 1385 por Martín el Humano, el camino se adentra en la sierra dejando atrás puntos estratégicos como las cruces de Pallás y San Sebastián, fuentes como la de Pi, del Oro, Tendero y Alameda, y refugios como el de los Uñoceros, o la propia Masía de Uñoz, propiedad de los cartujos desde el siglo XV, antes de llegar al Poblado Ibérico de El Torrejón.

Actualmente en recuperación, la Real Cartuja de Valldecristo estaba considerada como una de las más ricas del Reino de Aragón. Según testimonio de Escolano fue "el más insigne monasterio de cuantos tuvo en España la orden cartusana" y "una de las más hermosas y bien acabadas del Reino".

Pedro el Ceremonioso concedió a la Cartuja numerosos derechos y privilegios, convirtiéndose en uno de los núcleos más relevantes del reino a nivel religioso, cultural y político. En ella se estableció el Capítulo General de la Orden y, posteriormente, la Casa Capitular. En 1990 fue declarada Bien de Interés Cultural.

Recomendamos visitar la página web http://cartujavalldecrist.es/es/, donde hay disponible información y recursos sobre esta importante cartuja.