Clase Chilopoda

Clase Chilopoda

Comúnmente conocidos como escolopendras y ciempiés, Los Quilópodos (Chilopoda, del griego kheilos, 'labio' y podos, 'pie') constituyen una clase de Miriápodos de la que se conocen fósiles desde el Cretácico. Con unas 3.300 especies descritas, casi todos ellos son carnívoros, y para capturar a sus presas disponen de unos apéndices bucales muy desarrollados que secretan veneno.

El cuerpo de los Quilópodos es alargado y aplastado, está  formado por entre 19 y 181 segmentos o anillos (metámeros), y se encuentra dividido en dos regiones o tagmas:

  • Cabeza generalmente es de forma lenticular o rectangular y posee una placa cefálica. De su margen frontal o anterolateral emergen un par de antenas filiformes, Algunas especies poseen ojos laterales consistentes en una agrupación ocelar de forma globosa que, en algunos grupos, puede faltar. Con tres pares de apéndices bucales, la mandíbula y 2 pares de maxilas, el primer par de maxilas está situado ventralmente a las mandíbulas y el segundo es mayor y recubre parcialmente al primero. La boca está situada ventralmente.
  • Tronco con un número de variable de metámeros semejantes (no hay una clara regionalización), generalmente con un par de apéndices cada uno. Los del primer segmento se modifican y se transforman en las forcípulas, grandes uñas que alojan en su interior una glándula venenosa que usan para capturar sus presas, actuando como piezas bucales adicionales. Las patas se articulan lateralmente y su orientación varía según su posición. En los metámeros anteriores se dirigen hacia adelante, después, progresivamente, se disponen perpendiculares al eje del cuerpo y, en los metámeros posteriores, se dirigen hacia atrás. El último par puede ser algo diferente de los anteriores, más largo y robusto, y en ocasiones con fuertes espinas, se denomina par anal y lo utilizan para defenderse o para atraer al sexo opuesto, por lo que se aprecia un claro dimorfismo sexual. Los órganos sexuales también se ubican en este último segmento, por delante del telson, en el que entre dos valvas se abre el ano.

En la reproducción de los Quilópodos no interviene la cópula, sino que el macho deposita un espermatóforo para que la hembra lo recoja. La protección de la puesta puede adoptar diversas formas. Algunas especies buscan una cavidad segura y se enrollan sobre ellos hasta la eclosión, mientras otras forman ootecas y abandonan los huevos en un lugar seguro.

Los Quilópodos son lucífugos e higrófilos debido a su alta tasa de pérdida de agua, por ello es frecuente hallarlos en lugares con un determinado grado de humedad, a resguardo de la exposición solar directa. Sus hábitats habituales son debajo de las piedras, en la hojarasca, el humus y en musgos, otros han sido capaces de adaptarse al ambiente subterráneo.

Los Quilópodos se desplazan más rápidamente que los Diplópodos, están adaptados para correr y muchas de sus peculiaridades están relacionadas con la evolución de una marcha rápida. Son depredadores, siendo su alimento preferido artrópodos pequeños o de su misma talla, la presa es capturada y aturdida o muerta con las forcípulas. Las formas que presentan el último par de patas con fuertes espinas las utilizan para sujetar a sus presas antes de inocularles el veneno.

La clase Quilopodos está representada, en la Comunitat Valenciana, por los siguientes órdenes: